La movilidad en Santo Domingo ha dejado de ser un simple tema de conversación para convertirse en una preocupación diaria. No importa si es temprano en la mañana o en pleno mediodía: las vías principales del Distrito Nacional se encuentran constantemente saturadas. Esto no solo retrasa las actividades cotidianas de los ciudadanos, sino que también representa pérdidas económicas, desgaste emocional y un impacto negativo en la calidad de vida.
Frente a este panorama, el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) ha lanzado un programa ambicioso llamado “RD se mueve”. Su objetivo es claro: mejorar la movilidad urbana, reducir la congestión y hacer más eficiente el sistema de transporte.
Cambios por fases: un plan integral
El plan “RD se mueve” contempla varias fases que incluyen desde ajustes en los horarios laborales del sector público hasta cambios importantes en la forma en que se organiza el tránsito. La directora de movilidad sostenible del Intrant, Alexandra Cedeño, explicó que la propuesta incluye medidas a corto, mediano y largo plazo, muchas de las cuales ya están en ejecución.
Una de las estrategias más comentadas ha sido la eliminación de algunos giros a la izquierda en avenidas clave como la John F. Kennedy, 27 de Febrero y Abraham Lincoln. Aunque la medida ha generado dudas entre los conductores, el Intrant afirma que su propósito es reducir las interrupciones en el flujo vehicular, permitiendo que los semáforos permanezcan más tiempo en luz verde y se aumente la velocidad promedio.
Reducción de giros y reorganización del tránsito
En su primera fase, el programa eliminará 19 giros a la izquierda en intersecciones seleccionadas. Esto no significa que se prohíba el giro en toda la vía, sino en puntos específicos que generan cuellos de botella. En muchos casos, los conductores deberán avanzar un poco más y hacer uso de retornos o rutas alternativas indicadas por aplicaciones de tráfico.
Según Cedeño, en avenidas como la Kennedy, que recibe más de 100 mil vehículos diarios, las velocidades se han reducido a tan solo 25 km/h, cuando deberían superar los 60 km/h. En algunos cruces, la circulación cae hasta los 6 km/h, lo que equivale prácticamente a estar detenido. Con estas intervenciones, se espera aumentar significativamente la fluidez.
Transporte público y paradas reguladas
El programa también busca reorganizar el transporte colectivo, que muchas veces se detiene en cualquier punto, generando más congestión. Para mejorar esta situación, se está promoviendo el sistema integrado de transporte público, con paradas definidas y unidades más modernas como los corredores de autobuses.
La idea es que los carros de concho y motoconchistas se integren gradualmente a este sistema, conectando con infraestructuras como el Metro o el Teleférico. Este proceso incluirá el uso de una tarjeta única para abordar diferentes medios de transporte, lo cual facilitará la experiencia del usuario y ayudará a disminuir el uso del vehículo privado.
Cambios en el horario del sector público
Otro componente clave del programa es el escalonamiento de los horarios laborales en instituciones gubernamentales. A partir de julio, las entidades públicas trabajarán en tres turnos: de 7:00 a.m. a 3:00 p.m., de 7:30 a.m. a 3:30 p.m. y de 8:00 a.m. a 4:00 p.m. La medida busca reducir la carga de vehículos en las horas de mayor tráfico, especialmente entre las 7 y las 8 de la mañana.
El sector privado ya había implementado cambios similares tras la pandemia, incluyendo jornadas más flexibles y modalidades de teletrabajo. El Intrant espera que esta modificación en el sector público complemente esa transformación y contribuya a una mejor distribución del flujo vehicular.
Estacionamiento regulado y nuevos parqueos
Uno de los desafíos más notorios en sectores como Piantini, El Millón y Evaristo Morales es el estacionamiento desordenado. Por eso, el plan incluye la regulación de los espacios disponibles para parquear, estableciendo franjas horarias y habilitando solo un lado de la vía para esa función. Además, se está desarrollando un sistema de parqueo público administrado por la fiduciaria “Parquéate RD”.
Ya se construyen estacionamientos en zonas como Gascue y el Centro de los Héroes, y se están identificando nuevos lotes para ampliar la capacidad. Las grúas también formarán parte del plan para remover vehículos mal estacionados, pero con un enfoque educativo en la primera etapa.
¿Y los parquímetros?
Aunque todavía no se han implementado, los parquímetros forman parte del plan a largo plazo. La idea es que, una vez se consolide la reorganización del tránsito y el estacionamiento, se incorporen mecanismos de control como estos para asegurar que los espacios públicos se utilicen de manera eficiente.
¿Cuándo veremos los resultados?
De acuerdo con las proyecciones del Intrant, la reorganización del estacionamiento podría mejorar hasta en un 30 % los tiempos de recorrido. La optimización de los semáforos y la reducción de fases podrían aportar otro 26 %, y las mejoras colectivas podrían alcanzar entre 15 % y 20 % de eficiencia adicional.
Aunque estas cifras son alentadoras, Cedeño aclara que no son soluciones milagrosas. El verdadero cambio vendrá de un proceso continuo que requiere colaboración entre instituciones, empresas y ciudadanía.
Un cambio necesario para todos
El programa “RD se mueve” no solo busca reducir los tapones, sino transformar la manera en que nos desplazamos por la ciudad. Implica ceder, adaptarse y asumir nuevos hábitos, tanto en el transporte público como privado. La clave está en entender que el espacio vial debe ser compartido y gestionado de forma inteligente, si queremos lograr una ciudad más fluida, ordenada y humana.
Con el respaldo del gabinete de transporte, la Alcaldía del Distrito Nacional y otras entidades, este proyecto representa un paso firme hacia una mejor movilidad urbana. Ahora, el reto es mantener el compromiso y lograr que cada medida sume al bienestar colectivo.